Juan Reche es un vecino de Oria que cada diciembre abre las puertas de su casa para que todo aquel que lo desee pueda ver su monumental Belén, el cual prepara cada año con ilusión y por el que asegura que pasan más de 300 vecinos.
El Belén se compone por más de 300 figuras articuladas y lo encaja en el salón de su propia casa, dejando el espacio justo para que puedan sentarse en su esposa y él en un sillón.
Lo peculiar de este Belén articulado es que se representan escenas típicas de la vida y costumbres almerienses y que éste cobra vida cuando el propio Juan le habla cada mañana. Cuando se levanta Juan les anima a moverse y estas figuras, al estar articuladas, comienzan a realizar cada una de ellas su función.
Este vecino orialeño cuenta para otros medios que abre el salón de su casa siempre que le tocan la puerta y que ésta es su motivación para crearlo año tras año.