¿Sabías que El Valle del Almanzora ya contaba con habitantes desde hace aproximadamente 4.500 años a.C?. Esto como poco, porque es una aproximación. Quizás se asentaron inclusos años antes.
¿Y cómo pudimos saber estos datos? Porque en 2017 se encontraron unos restos en el yacimiento conocido como «Macael Viejo», lo que le hizo honor a su nombre.
Y fue precisamente el Ayuntamiento de Macael quien publicó los hallazgos que tuvieron lugar durante una campaña de excavación en «Macael viejo». Se trabajó sobre la necrópolis existente, el aljibe árabe y la vivienda medieval; restos todos ellos que en el municipio conocían desde hace tiempo pero nadie se imaginaba que hubieran restos de época neolítica.
La campaña de excavación duró unos dos meses y fue dirigida por el profesor titular de Prehistoria y Arqueología de la Universidad de Granada, Gabriel Martínez Fernández, siendo dirigido el trabajo de campo por dos arqueólogos de Granada. En dichos trabajos también participaron los trabajadores del Programa de Fomento del Empleo Agrario.
Este asentamiento siempre se consideró de época romana, musulmana y medieval pero estos restos hallados cambiaron todas las sospechas, porque constataban la presencia humana en época neolítica y argárica, lo que influyó en un cambio en la historia. Fue la primera necrópolis de época musulmana que se excavó en el Valle del Almanzora. Se obtuvieron unos resultados óptimos sobre el tipo de enterramiento y permitían que los antropólogos pudieran estudiar y analizar las patologías de los cadáveres encontrados.
Se pudo excavar el aljibe de manera perfecta y conocer sus dimensiones y capacidad, debido a la buena conservación de éste, siendo aquí donde aparecieron los restos de la edificación romana. Con respecto a la vivienda excavada fue relevante la aparición de abundantes restos cerámicos.
Más tarde de este hallazgo, en 2022, los trabajos arqueológicos se volvieron a retomar en el yacimiento de Macael Viejo. En esta quinta campaña las excavaciones se centraron en un área de la necrópolis bajo medieval, la cual se estima que tiene una extensión de 2 hectáreas.
En ese año se hallaron tres enterramientos de personas adultas cuya separación entre ellas se encontró construida a base de mampuestos guardando una disposición y orientación más homogéneas entre ellas que con el resto. Además, también se encontró documentación in situ de varias estelas de esquisto y pizarra que marcaban la posición del enterramiento y eran su elemento más visible. Salvo en algunos casos que se conservaron fragmentos parciales no se habían documentado tantas y tan variadas en un mismo espacio y sin alteración.
Con estos resultados llevados a cabo en estos años se cuenta con un gran nivel de información que permitirá conocer detalladamente a la población de Macael Viejo durante la Baja Edad Media.